La Copa Sudamericana 2025 llega a su capítulo final y el continente vuelve a mirar hacia Paraguay. En el Estadio Ueno Defensores del Chaco, Lanús y Atlético Mineiro protagonizarán una definición que mezcla historia, tensión y una rivalidad marcada por heridas todavía abiertas. El Granate busca un nuevo título internacional y, sobre todo, una revancha largamente esperada. Del otro lado, el Galo pretende reafirmar su jerarquía continental y extender una paternidad que pesa en los libros.
Un historial cargado de cicatrices
El cruce entre argentinos y brasileños no es nuevo ni tampoco liviano. Lanús y Atlético Mineiro se han enfrentado en dos series decisivas que quedaron grabadas en la memoria de ambos clubes: la Copa Conmebol 1997 y la Recopa Sudamericana 2014. En ambas oportunidades, el equipo brasileño salió victorioso.
En aquella Conmebol del 97, el Galo dio un golpe contundente: goleó 4-1 en La Fortaleza y selló el título con un 1-1 en Belo Horizonte. La frustración granate derivó incluso en incidentes postpartido que todavía se recuerdan. Diecisiete años más tarde, ya con Ronaldinho como figura, Mineiro volvió a imponerse en la Recopa. Ganó 1-0 en Argentina y, pese al empuje de Lanús en Brasil, un 4-3 en el alargue sentenció nuevamente la historia a favor del conjunto belorizontino.
Esos cuatro enfrentamientos dejaron un saldo doloroso para Lanús y una marca de autoridad para el Galo. Por eso, el duelo de este 2025 llega con un condimento especial: la posibilidad de una revancha histórica.
Probabilidades y escenario del partido
De acuerdo con datos de Bwin, Atlético Mineiro parte como favorito para levantar el título, con un 58% de probabilidades frente al 42% de Lanús. Sin embargo, la paridad que muestran ambos equipos en su presente y el formato de partido único abren la puerta a cualquier desenlace.
Final: Lanús vs Atlético Mineiro
Fecha: sábado 22 de noviembre de 2025
Lugar: Estadio Ueno Defensores del Chaco (Paraguay)
Capacidad: 42.354 espectadores
Lanús, entre la ilusión y la madurez
El conjunto dirigido por Mauricio Pellegrino llega a Asunción tras un 2025 de reconstrucción. Pasó de un inicio de temporada irregular, con cuestionamientos de la hinchada, a instalarse entre los mejores equipos del fútbol argentino. Lideró su grupo en la Sudamericana y dejó en el camino a Central Córdoba, Fluminense y Universidad de Chile, esta última serie definida por un gol clave de Rodrigo Castillo.
Esta final será la octava definición internacional de su historia y la tercera en Sudamericana. En 2013 levantó su primer título tras vencer a Ponte Preta, mientras que en 2021 cayó ante Defensa y Justicia en Córdoba. Hoy, Lanús es el único equipo argentino que sigue en competencia internacional.
Atlético Mineiro, experiencia y un presente incierto
El Galo vive un año contradictorio. Aunque es un club habituado a instancias decisivas, su 2025 no ha sido brillante: quedó fuera de la Copa de Brasil, no disputó Libertadores y navega a mitad de tabla en el Brasileirao. El ciclo de Jorge Sampaoli arrancó con turbulencias, pero el equipo mostró resiliencia en Sudamericana. Tras terminar segundo en su grupo, debió afrontar el repechaje, eliminar por penales a Atlético Bucaramanga y superar luego a Godoy Cruz, Bolívar e Independiente del Valle.
La experiencia del club en escenarios de alta presión es un factor que no puede subestimarse.
Una final que escribe su propio capítulo
Lanús busca cerrar una herida que lleva más de dos décadas. Atlético Mineiro pretende confirmar la superioridad que ha demostrado en esta rivalidad. Los antecedentes, duros y cargados de emociones, no garantizan nada, pero sí potencian una final que promete intensidad desde el primer minuto.
Todo se resolverá en 90 minutos. O más. La Sudamericana 2025 pone frente a frente a dos equipos con caminos distintos pero ambiciones idénticas. El Granate quiere que “la tercera sea la vencida”. El Galo quiere evitarlo. En Asunción, la historia vuelve a llamar. Y esta vez, el desenlace está por escribirse.













