Lanús llega a la semifinal de la Copa Sudamericana con una campaña construida sobre solidez defensiva y momentos decisivos: superó la fase de grupos con actuaciones consistentes, ganó una dramática llave en octavos en los penales y dejó en el camino a Fluminense en cuartos para meterse entre los cuatro mejores.

Ahora, la serie con Universidad de Chile está abierta tras el agónico 2-2 en Santiago: Lanús dominó el primer tiempo y se fue al vestuario con una ventaja de 2-0, pero la U lo igualó sobre el final con un penal en el minuto 99. La vuelta será el jueves 30 a las 19:00 horas.

Camino a la semifinal: números y momentos clave

En la fase de grupos, Lanús dejó resultados destacados (entre ellos victorias como local ante Melgar y Vasco da Gama) que le permitieron clasificarse con autoridad. En octavos, la serie contra Central Córdoba se definió en los tiros desde el punto penal, tras igualar la llave y ganar 4-2 en la definición. 

Para los cuartos, Lanús resolvió otra serie cerrada ante Fluminense con un triunfo agónico que le dio paso a la semifinal. Estos cruces muestran un equipo capaz de sobrevivir a la tensión y de encontrar respuestas en los instantes decisivos.

La ida en Santiago: de la ventaja al sufrimiento

La primera semifinal en el Estadio Nacional dejó a Lanús con sensaciones encontradas. El equipo de Mauricio Pellegrino golpeó temprano y Rodrigo Castillo anotó un doblete antes de la media hora, un inicio casi perfecto que parecía encaminar la clasificación.

Sin embargo, la U reaccionó: Lucas Di Yorio descontó en la segunda mitad y, en tiempo de descuento, Charles Aránguiz convirtió un polémico penal que puso el 2-2 definitivo y dejó la llave totalmente abierta para la revancha. El empate visitante obliga a Lanús a definir en casa con toda la presión y expectativa del hincha.

Lanús y sus antecedentes en semifinales

El historial de Lanús en esta instancia invita al optimismo. En 2013, con Guillermo Barros Schelotto en el banco, el Granate superó a Libertad en semifinales y luego venció a Ponte Preta en la final (3–1 global), para coronarse campeón de la Copa Sudamericana.

Siete años más tarde, en 2020, de la mano de Luis Zubeldía, Lanús volvió a llegar a la final tras eliminar a Vélez en semifinales. Sin embargo, cayó ante Defensa y Justicia en Córdoba, en una final íntegramente argentina que se disputó en plena pandemia.

Ahora Lanús tiene la ventaja psicológica de haber marcado dos goles fuera de casa, pero también la responsabilidad de cerrar la serie ante su público. En esta instancia no cuenta la regla del gol visitante, por lo que el Grana necesita ganar para avanzar o mantener el control del partido para buscar el resultado que lo lleve a la final.  El 2-2 de la ida deja el escenario servido para una definición apasionante en La Fortaleza